Humildad y paciencia
La que comencé a sentir
Desde que entré en esta Iglesia
Al observar a estos jóvenes
Sentados con fe bien cierta
Con anhelos contenidos
Debido a esta larga espera
Señores eso se llama Humildad, también paciencia.
Que buen consejo cristiano
Que buen consejo el que diera
Ese que todo lo puede
Y que en silencio se sienta
Ese que gotas de sangre
No derrama aunque las tenga
En el fondo de su alma
Y en su corona de pena
Qué Humildad y qué paciencia
Nos regala y nos enseña
Nos instruye con aquello
Que en propias carnes viviera
¿Es que a caso no es fortuna
Que en medio de esta tormenta
De sinsabor desatado
Y espera que se hace eterna
Venga de nuevo el que todo
Con sus manos consiguiera
A decirnos, hijos míos, tranquilos, que todo llega,
Que tan solo hay que esperar,
Con humildad y paciencia?
Qué privilegio tener
A tal maestro tan cerca
Del que poder aprender
Esas cosas que, de veras,
No se explican en los libros
Tampoco en enciclopedias
Porque son la distinción
Que marcan la diferencia
La grandeza de aprender
Con Humildad y Paciencia
Renacimiento en el alma
De tal virtud, tal belleza
Al contemplar cara a cara
El rostro de su grandeza
Un pasión desbordada
Un Cristo que nos enseña
Que cada Lunes es Santo
Sin que nadie lo desmienta.
Que siempre está a nuestro lado
Que con bondad nos espera
Aunque haya alguna veces
Que no nos demos ni cuenta.
Y a vosotros os pregunto
Sin acritud ni sorpresa
¿Existe cosa más grande
que sin pedirlo siquiera
Tengamos a cada hora,
En cada paso y escena
Un Padre que nos protege
Que nos cuida y encomienda
Que nos da to’ lo que tiene
Y con cariño se entrega
Por el amor de sus hijos
De Alicante y de la Tierra?
Por eso queridos míos Jóvenes de nuestra Era
Apreciemos con orgullo
Con majestad y nobleza
La dicha de contemplar
La imagen de la pureza
En este templo cristiano,
Tabernácula presteza
En todo momento y causa
Toda hora y toda fecha,
Redentor del Lunes Santo
De alicantina belleza
Al Santísimo Señor
De la Humildad y la Paciencia.
El pregonero hizo mucho hincapié en la situación que vivimos actualmente, que no nos permite realizar con normalidad nuestros actos de semana santa, pero “ya respira Alicante su pasión cofradiera”.
Además expresó sus ánimos a la “juventud cofrade de esta tierra de estirpe y de gracia alicantina, hoy sale a la calle la primera cruz de guía”, ya que en estos tiempos que corren es muy complicado seguir hacia adelante, siguiendo los pasos de nuestros mayores y siendo el futuro de esta nuestra Semana Santa.
“Que se escuche el tono de la saeta que al unísono cantamos y lloramos los herederos de la conservación de estas cosas tan nuestras”
Toni Valenzuela sorprendió a los asistentes con la composición y el cante de un cuerpo de sevillanas, recordando que tenemos Semana Santa en Alicante:
Semana Santa Alicante
Y aunque no te lo parezca
Con tu arte nazareno
La túnica llevas puesta
Que otro año volveremos
Muy dentro de nuestra esencia
A cantar con corazón
A la Virgen una saeta
Madre mía no me llores
mantengamos la esperanza
Pronto saldremos de esta
Con el Santísimo Cristo
de la Humildad y la Paciencia
La Exaltación va llegando a sus páginas finales, agradeciendo el honor de haber podido pregonar está X Edición, y dando esperanzas en estos momentos tan complicados que vivimos, debidos a la pandemia, haciendo referencia a que saldrán los pasos, “estamos juntos en esto”, “se volverá a abrir la puerta a ese mundo que era nuestro antes de la pandemia”.
Palabras que emocionan a nuestros asistentes:
Estamos juntos en esto.
Fe, y esperanza cierta
confianza, alicantinos,
Y tengamos la certeza
Que cuando menos pensemos Se volverá a abrir la puerta
A ese mundo que era nuestro
muy antes de la pandemia.
Volveremos a abrazarnos
Sin temor y sin reservas
Y a disfrutar sin complejos
De las sonrisas sinceras.
Volveremos a vivir
Sin tanto límite y regla
Y sin mirar el reloj
Por miedo al toque de queda
A reír con los amigos
Pues no hay terapia más buena Ni más barata tampoco
Contra el estrés y la pena
Volverá a salir el Sol
Se acabará la tormenta Soplarán dulces los vientos
Y volverán las cosechas
Ya no habrá que resignarse
A rellenar nuestras cuencas
De lágrimas y recuerdos
De miedos y de incertezas.
Volverán a darse besos
Sin la mascarilla puesta
Y en los bares ya no habrá
Que hacer recuento en las mesas
Ni tampoco en Navidad
Habrá que guardar prudencia De si somos demasiados
La noche de Nochevieja
Volverán las aventuras
De billetes de ida y vuelta Despegarán los aviones
Se reabrirán las fronteras
Volverán los hospitales
Y también las residencias
A recobrar la esperanza
Que arrebató la pandemia
Ya no habrá que doblegar Ninguna curva funesta
Ni contaremos al día
por centenares las pérdidas
Se reabrirán los museos
Y se hablará de otros temas
Al escuchar las noticias
De Antena 3 o la Sexta.
Volveremos a acercarnos
De nuevo a nuestras abuelas
Y a comérnoslas a besos
Que larga que fue la espera
Volverán los más pequeños
A compartir en la Escuela
El bocadillo en el patio
Con su sincera inocencia
Volverán de nuevo un día
A llenarse las Iglesias
Y la pila bautismal
De agua estará repleta
Y la ciudad de Alicante
Volverá a vestir de fiesta y quemará por San Juan
De nuevo grandes fogueres
Volverá la libertad
A reconquistar las tierras
Como moros y cristianos
Por San Nicolas celebran
Volverán las Hermandades
Con sus tallas de madera
A evangelizar al pueblo
Al llegar la primavera
Y rebosarán sus calles
De túnicas nazarenas
Con el perfume cofrade
Del incienso y de la cera
Y así volverá también
El señor de vuestra esencia Llenando cada rincón
Con su humildad y paciencia
Mientras su madre bendita
Lo acompañará de cerca
Con lágrimas en su rostro
De alegría y no de pena
Y con estas retahíla
De amor y esperanza eterna
El pregón toca su fin
Que de comienzo la fiesta
Que empiece Semana Santa
Al rescoldo de la hoguera
Que late en nuestro interior Como en cada primavera
Y aunque haya que esperarla Con humildad y con paciencia Con lágrimas en los ojos
Y tal vez con impotencia Protegednos mientras tanto Porqué sé que todo llega
No podrá con Alicante
Esta trágica pandemia.
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